lunes, noviembre 28, 2005

Hipocresía sexual

Si el sexo fue hecho por Dios, el Universo, la Evolución o quién creas fue el autor del mundo y por ende el creador de esta gran herramienta física, energética o espiritual, ¿por qué le tenemos tanto miedo a aceptar o hablar de sexo?, ¿No es un regalo de los dioses? Quién nos lo haya otorgado, no le puso reglas, las reglas se las hemos impuesto los seres humanos.

Uno de los placeres más grandes de todos los hombres y mujeres es el tener un orgasmo. Y que me digan lo contrario

Muchas personas piensan que el sexo debe servir sólo para la procreación, por lo que me imagino sólo tendrán sexo cuando quieren tener un hijo, otros dicen que debe ser sólo con tu pareja, otros cuando estás casado, otros cuando quieras. Muchas de estas ideas vienen de instituciones como el gobierno y la iglesia (Que igual andan casados y de la mano teniendo sus propios orgasmos gubernamentales y religiosos).

Pero entonces, ¿por qué el sexo es una cosa tan apasionante y deliciosa, porqué nos retorcemos de placer cuando lo hacemos y soñamos con la próxima vez que lo hagamos? Seamos homosexuales, heterosexuales, o como queramos definirnos (o peor aún, como nos quieran definir), el sexo es vital para nuestra existencia. Y cada cuál debe ser, no sólo el autor de su orgasmo, sino el que pone sus propias reglas y decisiones sobre cómo, donde y con quién lo va a tener. Siempre que sea por mutuo acuerdo, en privado, y que ambas o varias partes estén en mayoría de edad para regir sus decisiones, nadie más se debe meter.

Aún así, muchos insisten en regular, e inmiscuirse en nuestra vida sexual y privada y decirnos hasta donde podemos llegar. ¿Suena ridículo no?

En Puerto Rico el año pasado el senado retumbaba en argumentos sobre la sodomía, ¡Debemos castigar a los que tienen sexo anal!. Si, decían ellos, pongámosle reglas al culo. Y qué pasó, que la gente se alzó y dijo “A mi nadie me dice que hacer con mi culo” y se acabó el tema.

Pero peor aún es la hipocresía que existe en el mundo respecto al sexo. Varios meses atrás, el alcalde de Spokane en Washington, Jim West un prominente republicano, típico conservador que atacaba fuertemente los derechos de los homosexuales, tuvo que admitir ante la prensa que él mantenía relaciones sexuales con otros hombres. ¿Curioso no? Luego de atacar severamente la homosexualidad, ¡wooops!, resulta que se le olvidaba que a él le gustaba tener sexo con hombres. No sólo esto, sino que este hombre de 54 años de edad ofrecía regalos, favores, e incluso un trabajo en prácticas en el ayuntamiento en un ‘chat’ electrónico en una página de la Internet gay, Gay.com.

West, también apoyó leyes que prohibían a los homosexuales casarse y hasta trabajar en escuelas y guarderías.

¿A qué le temen señores? ¿No es la sexualidad cosa íntima? ¿No se llaman partes íntimas las que uno usa en el sexo? Cada cuál tiene sus bases, creencia e historias, lo importante es ser sinceros consigo mismos, escoger o no escoger lo que le venga en gana, pero no meterse con las decisiones de los demás, y menos tratar de regirle los orgasmos a la ciudadanía. ¡Qué viva el libre albedrío

2 comentarios:

Anónimo dijo...

wow!

tanta espera por uno de tus post y nos encontramos con este

que te puedo decir? desde mi inocente virginidad, y a mucha honra, la sexualidad es una arte de emociones, y para expresarse, necesitan libertad

Ya no me enganas, descubri tu blog dijo...

las reglas. disculpa, pero me parece ingenuo eso de decir que las reglas las ponemos nosotros. por qué caminamos con los pies y no con las manos? por qué comemos por la boca y no por el ano? creo que es iluso pretender que las reglas son sólo interpretaciones subjetivas. el diseño implica una intencionalidad. la atracción sexual es el mecanismo para favorecer la reproducción. las anatomías de hombre y mujer son complementarias no por casualidad. hay una intencionalidad en el diseño.

si hay un error en la fabricación o el desarrollo de un individuo, que desemboca en una atracción homosexual, pues no es otra cosa sino una falla. ahora bien, la connotación moral que esto habitualmente tiene sí me parece inadecuado y dañino. contra eso sí creo que hay que luchar. pero llegar a decir que no es una falla, que es algo normal, me parece una exageración ridícula.

respecto de jim west, claramente es un tipo perseguido por el qué dirán de la sociedad y que actúa con dureza para proyectar convicciones sólidas, pero en el fondo es un gallina, que no quiere reconocer su situación públicamente, pero sí le da curso privadamente. es como el tipo de belleza americana. por mi parte, yo no la pregono, porque considerándola una falla, no es algo para andar publicando, pero tampoco le doy curso privadamente involucrando a otras personas. hago lo que tengo a la mano. satisfago conscientemente el instinto. y aunque tengo claro que sería muchísimo más satisfactorio hacerlo en pareja, no pretendo ceder a algo que me parece incorrecto.

saludos