¡La vida es difícil!

Si a todo lo que manejamos día a día, le agregamos una realidad más, como la de reconocer que (en la mayoría de los casos), somos “diferentes” a nuestros padres, hermanos(as), familia y a mucha de la gente que nos rodea, ya que tenemos sentimientos y/o nos sentimos atraídos hacia una persona de nuestro mismo sexo… la vida se complica un poco más.

La vida se complica un poco más debido a que, desafortunadamente, todavía en el siglo XXI, para muchos, el homosexualismo, lesbianismo y bi-sexualismo, no es algo “normal”. Es visto como algo malo, pecaminoso y además es rechazado. En términos psicológicos sufren de algo llamado homofobia.

Lo más grave de todo esto es que los homosexuales, lesbianas y bi-sexuales se lo creen e internalizan todo ese rechazo y juicio negativo. En términos psicológicos sufren de homofobia internalizada y por consiguiente se rechazan a si mismos, se sienten pecaminosos, malos y anormales. ¿Tiene sentido no?

Bueno, ya es hora que se diga la verdad. Se han hecho demasiados estudios científicos, pruebas psicológicas, estudios médicos, exámenes de laboratorios. Todo para estudiar y comprobar la anomalía, lo que hace diferente a estos seres humanos. Que es lo que pasa que los hace sentir atraídos a personas de su mismo sexo, o a sentir igual atracción a los dos sexos. No se ha encontrado algo que justifique que sigamos diciendo que estos seres humanos son anormales. Entonces podemos concluir que tu identidad sexual no te hace anormal, por lo tanto, en cuanto a tu identidad sexual se refiere, ERES NORMAL .

Ya, dicho esto, la aceptación de nuestra sexualidad no tiene porque ser un proceso tan difícil. Como todo proceso toma tiempo. “Salir del closet” (traducción del ingles “coming out”) es el termino utilizado para describir un proceso de reconocernos y aceptarnos como homosexuales. El primer paso es reconocer que tenemos sentimientos de atracción por una persona del mismo sexo; luego por lo general lo compartimos con alguna persona en quien confiamos; después se empieza por buscar lugares o personas que son iguales a nosotros, que comparten nuestro estilo de vida; mas adelante, se va compartiendo con las personas mas allegada a nuestro circulo intimo, mas amigos y mas familiares; con el tiempo, se sale del closet en el trabajo, y por ultimo a la comunidad.

Es conveniente que entendamos que salir del closet es una elección personal en la que se deben medir los riesgos. Lo importante es que no pongamos en peligro nuestra vida. Que lo hagamos cuando estemos preparados para hacerlo, cuando sepamos contestar las posibles preguntas que nos hagan. La orientación sexual no es un arma, que podemos utilizar para herir o castigar a alguien. Recuerda que entre más te aceptes y manejes tu identidad sexual, mejor será la respuesta de los demás. También, es conveniente recordar, que así como tu te tomaste tiempo para procesar tu salida del closet; le des a los demás tiempo para que hagan lo mismo y sin esperar que los demás te acepten inmediatamente.

No, no es fácil… enfrentar el rechazo, y en ocasiones sufrir tanto prejuicio y tener que lidiar con tanta ignorancia. Por eso, en ocasiones, escogemos evitar el dolor. Y es cuando nos lanzamos a “vivir la vida loca”, tener sexo con múltiples parejas, hacer drogas, tomar, pensando que eso nos evita el dolor. Pero sabemos que esos comportamientos hacen es aumentar el dolor y el sufrimiento, es solo otra forma de nutrir nuestra homofobia internalizada.
Pero, la vida no tiene que ser un proceso tan difícil. La vida se hace mas fácil si reconocemos cual es nuestra realidad, nuestros talentos y nuestras limitaciones. Es vital estar conscientes que cada ser humano nace con dones, talentos y características que lo hacen único y especial. Nadie es igual a ti. Y que tu al igual que todos viniste dotado de todo lo necesario para triunfar¡Es como mágico! Cuando se llega el día en que estamos dispuestos a comprometernos con nosotros mismos, a no sufrir más, a buscar otros caminos, otras soluciones. Es decir, cuando decidamos ya parar de vernos como anormales, y parar ya de hacernos daño. Se empiezan caer las mascaras, va saliendo nuestro verdadero ser: un ser autentico, sincero, sensible, que se muestra como realmente es en todas las situaciones en lugar de proyectar imagines que agraden o inciten o seduzcan a los demás; un ser que va adquiriendo una conciencia de que existe una diferencia importante entre ser y actuar cariñosamente, entre ser estúpido y actuar estúpidamente, entre ser inteligente y actuar inteligentemente.
Y si eres constante y fiel a tu compromiso, descubrirás en ti a un ser que nutre su espíritu porque sabe que el se ama, se respeta y se acepta, tal y como es. Un ser que aprende a reconocer sus sentimientos y sus limitaciones y los valida. Un ser que no consagra su vida a lo que debe ser, sino por el contrario se esfuerza por ser el mismo; le entusiasma la vida: goza con su trabajo, el juego, la comida, las otras personas, la naturaleza, el sexo lo convierte en hacer el amor; goza de sus triunfos, y de las realizaciones de los demás, sin envidia. Aprende a validar su sexualidad, sin sentimientos de auto-culpabilidad o auto-rechazo, esta convencido que es normal. Todos los días, encuentra formas de nutrir su cuerpo, su intelecto, sus emociones y su espíritu. Elige expresarse con libertad, con respeto y serenidad Si no lo has logrado aun…te invito, Arriésgate, comprométete. Empieza el proceso mágico de descubrir tu ser genuino y a crecer.